Por Alfredo Villasmil Franceschi
Santo Domingo. Con la serie abajo 2-0 para las Águilas Cibaeñas frente a los Toros del Este, le tocó el turno al cubano Yoanner Negrín.
Llegó como siempre, para hacer su trabajo, con pocas credenciales. Y pasó lo que siempre pasa con este lanzador: se creció tanto, que ahora es el as de las Águilas. Lo demostró este lunes, cuando detuvo en seco la difícil ofensiva de los Toros del Este.
“Gracias a Dios pude recibir la ayuda de mis compañeros”, explicó el derecho. “Este juego era importante para nosotros, porque si lo perdíamos entonces estábamos en problemas. La serie se iba a poner 3-0”.
Negrín lanzó 6.0 entradas, espació dos indiscutibles y pasó a seis por las armas. Esto le dio a las Águilas la oportunidad de hacer carreras y de poner la serie ahora 2-1 a favor de los Toros.
«Yo siempre estoy mentalizado en el trabajo que voy a hacer y así salgo a lanzar”, dijo vía Zoom. “Al comienzo del juego los pitcheos no me cayeron en la zona, pero a medida que fue avanzando todo los pitcheos fueron cayendo mejor y eso contribuyó a la victoria”.
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Negrín dijo que utilizó siempre el mismo plan, el de siempre.
«El equipo necesitaba de una apertura así”, contó. “Había que darle un parón a los Toros y había que poner autoridad allí. Se pudo hacer y eso es bueno, porque ganamos”.
Negrín afirmó que fue pitcheo a pitcheo.
“Así lo hacía en Venezuela, en los juegos importantes”, destacó el que fuera importado de los Leones de Caracas y Cardenales de Lara en el país suramericano, donde le tocó lanzar en duelos de los Eternos Rivales de la LVBP, Leones y Navegantes.
“Uno siempre tiene un plan en mente y eso fue lo que pusimos en práctica. Después de estar un poco contrariado en el primer inning, tomamos el control del partido y ya vimos lo que sucedió”.
Esto no es azar ni nada que se le parezca. El cubano fue en la ronda regular dejó marca de 3-3 con 3.27 de efectividad más 30 ponches en 33 entradas completas de labor.
Venía de dos salidas muy malas, en la serie regular, en donde le anotaron 8 carreras en 7.0 entradas. Antes de eso, sólo permitió cuatro anotaciones en cinco aperturas.
Este martes se descansa en la semifinal. Será tiempo de reflexión y análisis. El miércoles se reanudará la serie en La Romana, pero con respiro, porque las Águilas Cibaeñas tuvieron en Negrín, una vez más, a su gran hombre,
Por Alfredo Villasmil Franceschi
