Un Grand Slam de Giancarlo Stanton y y cuatro jonrones en total llevaron a Nueva York a derrotar a Tampa Bay este lunes, 9 carreras por 3. Los Bombarderos del Bronx imponen récords y suman 31 anotaciones en sus tres choques de los actuales playoffs
Por Ignacio Serrano
ElEmergente.com
Los Yanquis se han enfrentado desde la semana pasada a dos de los mejores cuerpos de pitcheo en esta campaña de las Grandes Ligas y el resultado es claro: llevan 31 carreras, tres victorias en tres salidas y recuperan favoritismo a a toda velocidad.
Nueva York encendió su máquina trituradora de buenos lanzadores la semana pasada, ante los Indios, y no parece que tenga disposición de hacer que deje de funcionar.
Lo de Giancarlo Stanton, con su Grand Slam para sentenciar a los Rays en el noveno inning, marcó un récord en la franquicia: es la primera vez en la historia de la divisa más ganadora de todos los tiempos que sus integrantes consiguen jonrones con las bases llenas en encuentros seguidos de postemporada.
Lo de Kyle Igashioka, Clint Frazier y Aaron Judge, que también la pusieron de otro lado de la barda, igualmente es único: jamás esta novena había conectado 11 bambinazos en tres cotejos corridos en la acción decisiva de postemporada.
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El resultado de contar con toda su artillería disponible y con buena salud es este: una media de 10 rayitas por día, un invicto que empieza su segunda semana de imbatibilidad y la clara amenaza de arrebatarle el favoritismo a Tampa Bay.
Los ases Blake Snell y Gerrit Cole disputaban un compromiso cerrado, que ganaban los floridanos 3 por 2 en el quinto, cuando Higashioka y Judge la pusieron de otro lado de la barda, para darle a los suyos una ventaja que ya no perderían, camino a un lauro 9 por 3.
El resto del maltrato llegó en el noveno. Luego de que Aaron Hicks empujara una con sencillo, apareció Stanton con su bombazo.
«Esto es por lo que firmé la primera vez», declaró el slugger, en rueda de prensa divulgada por The Associated Press. «Esta es la época del año en la que debes dar un paso al frente y hacer tu trabajo».
En el caso de Stanton y los neoyorquinos, ese trabajo en 2020 es apabullar con batazos a sus adversarios.
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Lo que pasa es que cuando eso puchero son brutos eso es lo que pasa si tú cómo puchero te deja dar dos hit del cacher que batea menos de lo que pesa hay es donde está el problema
Higashioka, el catcher al que aludes, tuvo .771 de OPS esta temporada. No solo mucho mejor que Gary Sánchez, que ciertamente es un bateador temible, sino que fue superior a la media de las Grandes Ligas (que fue de .741). No sé de dónde sacas que es un bateador malo. Al menos ahora mismo no lo es