Los Extrabases de Alfonso Saer: beisbol en medio del coronavirus

COVID-19 es una espada de Damocles que pende maliciosa sobre
la patria mundial. Mientras se libra una batalla total en cada aldea del
planeta, los más acreditados laboratorios universales desarrollan una carrera
contra el tiempo en procura de una o varias vacunas que contengan al enemigo
invisible y microscópico… EL deporte, pugnaz, trata de sobrevivir en medio
del ataque inclemente de la pandemia, controlada a medias en algunos países y
aún vigente en la mayoría. Estadios vacíos, técnicos en las tribunas, exámenes
por doquier, se suman a una televisión fría, simulando por computadora el
público en las tribunas, con altavoces reproduciendo el sonido de los
aficionados mediante grabaciones. Es la realidad cruda, la impotencia del ser
humano frente a un rival que vino desde la milenaria China para mermar la población
y acosar a la ciencia… EL fútbol ha sido el primer deporte de masas en retar
al oponente asesino. El domingo vimos a la Fórmula 1 rugir sus motores en
Austria. El baloncesto de la NBA se jugará en Orlando. El tenis prepara sus
primeros raquetazos. La televisión es la gran aliada, una barca que no zozobra
en medio del embate. Las transmisiones son el oxígeno que rescata a los
deportes de gran difusión, en medio de pérdidas ingentes, incalculables.

LAS Grandes Ligas arrancan su calendario tras el litigio
entre propietarios y peloteros. La inauguración está pautada para el 23 del
corriente en una nación que lidera contagios y muertes. El país que domina al
mundo juega a no sabemos qué. Es una comparsa extraña en la cual la gente
desafía a la covid-19 y las autoridades no ensamblan una estrategia definitiva.
El peligro de contagio es evidente. Solamente entre la tropa peloteril
venezolana había 13 infectados hasta el pasado lunes, la mayoría asintomáticos,
aquellos que esparcen la infección sin saberlo. Varios jugadores han decidido
hacer mutis, temerosos de contraer la enfermedad. Nos aprestamos a un
calendario disminuido, reducido también a partidos en las mismas divisiones y
algunos careos contra la misma división de la otra liga. Uno tiene, empero, la
sensación de que el virus podría diezmar a las ligas mayores en alguna etapa
del torneo. Las medidas extremas tratarán de evitar un desplome absoluto y una
eventual suspensión del campeonato. No obstante, el optimismo es el mejor
elixir en estos momentos de tanta ansiedad e incertidumbre. Hay que guiar la
nave a puerto seguro en medio de esta crisis que está a plenitud.

EN nuestros predios la LVBP trabaja a puertas cerradas, sin
aspavientos ni anuncios en concreto. Se hacen pequeñas convenciones telefónicas
—a falta de la grande y tradicional— con la intención de salvar al evento,
tarea nada fácil, ni mucho menos accesible porque hay equipos que manejan la
especie de hacer un alto por este año… APARTE de la tenaz lid contra la
pandemia hay otros asuntos que resolver en financiamiento y logística. Es
seguro que si hay humo blanco se repartirá el evento entre Caracas, Maracay,
Valencia y posiblemente La Guaira. Por razones obvias no es posible montar la
justa en Margarita, Maracaibo y Puerto La Cruz. Ni siquiera estiman jugar en
Barquisimeto… LO cierto es que se trabaja para efectuar el anual compromiso,
avalado por los entes oficiales, apoyado en este sentido en cuanto a los
suministros esenciales para las respectivas sedes y el transporte inter urbano.
Por supuesto hay preguntas que contestar, una de ellas acerca de la salida de
los peloteros, técnicos y hasta directivos desde USA y su arribo a territorio
venezolano. Y otra gran interrogante: ¿Quiénes querrán jugar? No es descartable
que el calendario de la 2020-2021 sea aún más reducido que el del año anterior
(42 partidos). Además, Aragua y Magallanes deben arreglarse con la OFAC. En
fin, mejor no pronostiquemos. Vamos día a día.

KEN Sanders cumplió esta semana 79 años. Imaginamos que el
llamado «bulldog» —por su estirpe de peleador en la lomita— debe
estar por los predios de San Luis, su ciudad natal. Vino con Lara en la liga
occidental (1963-1964) y contribuyó al título en una temporada de abandonos y
problemas económicos que acabaron con el circuito. Valencia lo atrapó y con los
Industriales hizo el resto de esa campaña y toda la 1964-1965, totalizando
13-11. Cardenales debutó en la Liga Central en la 1965-1966 y lo volvió a tener
en sus filas. Totalizó en tres anualidades 20-22, pero con efectividad de 2.72.
Su tenacidad en el montículo lo llevó a completar 27 juegos en nuestros
certámenes, 19 de ellos con los guaros. Trabajó 497 innings en esa divisa. Era
buen bateador. Ligó para .225 (129-19) con la banda crepuscular… FÉLIX
Hernández renunció a la temporada con los Bravos. Dejará de percibir 100.000
dólares, una nimiedad en sus bolsillos si los comparamos con los casi 28 millones
que embolsó en el 2019… LOS jugadores de la LVBP pretenden una nueva
asociación o sindicato. Desde que Dionisio Acosta (QEPD) dejó la institución,
dicho grupo —anónimo e ineficiente— solo ha dado tumbos. Los nuevos
pretendientes son encabezados por Francisco Buttó.

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