Fresca todavía su actuación en las Ligas Menores, donde llevó a su equipo a la postemporada, y con la tarea pendiente de ganar esos dos juegos que le faltaron en enero, para conseguir el campeonato, se presentó en Barquisimeto el manager José Moreno, abriendo este lunes las puertas de la pretemporada de los Cardenales de Lara.
Es la segunda vez que Moreno toma el mando de los pájaros rojos desde las prácticas, en una jornada en la que contó con algunas de las figuras cuyos nombres posiblemente escribirá en el lineup que entregará el próximo 12 de octubre, en la inauguración de la justa.
Los crepusculares rompieron una tradición, al empezar a alistarse en un nido distinto a su habitual. El estadio Antonio José Herrera se encuentra sometido a importantes refacciones, por motivo de la próxima Serie del Caribe, y por ello se han mudado al Chino Canónico, también en la capital larense.
El antesalista Carlos Rivero y el designado e inicialista Jesús Montero estuvieron entre los primeros en llegar. Ambos alinearon en el sexto cotejo de la final, hace nueve meses, ante los Caribes de Anzoátegui.
Montero llegó dispuesto a retomar su viejo oficio de receptor, ante la llegada de varios bates que pueden ayudar en los dos roles que cumplió en los últimos dos años con los occidentales.
Yojhan Quevedo, muy usado detrás de plato por Moreno en la 2018-2019, estuvo entre los 27 jugadors que se entrenaron este lunes.
Dennis Malavé, contratado como coach de banca para sustituir a Carlos Mendoza, que declinó a su cargo por sus ataduras con el staff de los Yanquis de Nueva York, se estrenó la camiseta cardenalera, para empezar su andadura como principal asistente de Moreno.
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