El slugger venezolano Ernesto Mejía celebró su clamorosa jornada dominical, en la que sacudió tres bambinazos y empujó siete carreras, consolidándose como el dueño actual de la Triple Corona del bateo en la Liga Central, uno de los dos circuitos que componen la NPB en Japón.
«Fue un día bastante
especial», aceptó el portugueseño. «Me siento feliz de poder dar tres jonrones
por primera vez en mi carrera y, obviamente, de ayudar a mi
equipo a ganar. El primer jonrón fue con una curva, el
segundo con recta y el tercero ante un slider».
El último cuadrangular fue un grand slam, nada menos, y con ello volteó la pizarra ante Rakuten, para poner a ganar a Seibu.
«De verdad que es uno de los jonrones más emocionantes
que he bateado», aseguró Mejía, en declaraciones que hizo llegar a los medios de Venezuela. «El estadio estaba
full, la fanaticada estaba animada, había mucha bulla, casi 30 mil fanáticos, y de verdad que fue emocionante. Estoy muy contento de haber logrado este
nuevo récord personal y de ayudar al equipo a ganar”.
El toletero derecho trató de pisar tierra respecto a la Triple Corona.
«Todos saben que soy un bateador de fuerza», advirtió. «Siempre he
sido un bateador de alrededor de .300, de .290, por allí, pero
nunca he peleado por un título de bateo y obviamente no me
ilusiono mucho, porque no es mi fuerte. Sí me
haría feliz ganarla, pero es muy temprano para pensar en
eso. Simplemente voy día a día, turno por turno, pitcheo por
pitcheo todos los días. Trato de disfrutar mi juego y dejo todo
en manos de Dios. Ya veremos qué pasa”.
Reiteró que su firme inicio se debe al trabajo realizado en la temporada
muerta.
«No paré de correr, de hacer de ejercicios, de levantar
pesas, de batear, haciendo actividades físicas dentro del
campo», relató. «Me esperaba empezar bien, pero
obviamente no tan bien. No esperaba que iba a tener un
primer mes tan explosivo como el que estoy teniendo. Pero
pienso que se lo debo al trabajo, al sacrificio que he hecho y
estoy bastante contento. Todavía falta mucho, la temporada
es muy larga, y tengo que seguir trabajando y batallando. Aún
falta mucho. Me siento bastante relajado y bastante contento
con lo que hasta ahora he podido hacer”.
Ignacio Serrano
