Una lesión en la cadera envió este miércoles al camarero venezolano Gleyber Torres por primera vez en su carrera en las Grandes Ligas a la lista de incapacitados, donde posiblemente vaya a estar hasta después de la pausa del Juego de Estrellas.
El novato sensación de los Yanquis de Nueva York recibió descanso el martes, luego de sonar tres cohetes en el encuentro anterior, y
el manager Aaron Boone explicó al
diario New York Post y otros medios de comunicación que
su intermedista venía sintiendo rigidez en el músculo flexor de la cadera, razón por la cual decidió darle reposo. No se temía inicialmente que fuera algo de consideración.
Torres, de hecho, entró a la defensiva en el duelo de ese día contra los Bravos de Atlanta y apareció en el lineup abridor de este miércoles.
Sólo cuatro innings y dos turnos al bate duró la esperanza de Boone y el equipo. El caraqueño empeoró y tuvo que ser retirado de la acción, luego de recibir dos ponches.
«Lo necesitamos», lamentó el inicialista Greg Bird en declaraciones para el Post. «Él va a ser una parte muy grande de este club y obviamente ha demostrado todo lo que es capaz de hacer en situaciones importantes.
Torres deja promedios de .294/.350/.555, con 15 jonrones. Ningún pelotero de los Yanquis ha dado tantos cuadrangulares antes del Juego de Estrellas con 21 años de edad o menos, y ya quebró la marca de vuelacercas para un criollo en su primera zafra en la MLB.
Con 239 apariciones legales en el plato, todavía no reunía el mínimo necesario para luchar por el liderato de bateo (necesitaba 264 hasta este miércoles) y la ausencia hará más difícil que alcance la meta antes de finales de agosto, cuando menos.
«Estaba entusiasmado por cómo llegó (al estadio) y no dudé en alinearlo», dijo Boone. Pero luego del segundo ponche fue obvio que algo marchaba mal.
Oficialmente tiene una distensión, un tirón muscular en la cadera.
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