Ron Gardenhire, manager de los Tigres de Detroit, mostró su decisión de no apurar al lastimado slugger venezolano Miguel
Cabrera, motor ofensivo de su equipo, y subrayó su deseo de darle descanso un día después de sacarlo de acción con espasmos en el biceps izquierdo.
Cabrera se quedó en la banca este lunes, a pesar de que los felinos anotaron dos carreras y estuvieron a punto de empatar el encuentro ante los Rays de Tampa Bay, con Dixon Machado, un jugador de perfil defensivo, camino del home.
El piloto de los acuáticos, Kevin Cash, admitió al diario Tampa Bay Times que con temor vio al inicialista aragüeño en la puerta de la cueva en ese instante, pero el veterano nunca emergió.
El nativo de Maracay fue sometido a tratamiento el domingo, para aliviarle la molestia.
Es la tercera vez en 2018 que el
toletero derecho sale de acción por algún inconveniente físico. Todas han sido problemas menores: espasmos en la
parte baja de la espalda, un golpe en la cadera tras caer en el suelo y ahora
esto. Las primeras dos oportunidades regresó al lineup sin perder un día de actividad.
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