El receptor venezolano Francisco Cervelli ha estado jugando con dolores, últimamente con un pulgar inflamado, pero ha decidido mantenerse en el lineup a pesar de los problemas físicos, «porque esto no se ha terminado todavía».
Cervelli recibió un golpe en el pulgar de la mano izquierda, que le ocasionó un fuerte hematoma y molestias. Sin embargo, ha seguido alineando, luego de que los trainers de los Piratas de Pittsburgh le drenaran la sangre que acumuló debajo de la uña.
«Me siento mejor», le dijo al reportero del diario Pittsburgh Post-Gazette. «No estoy al ciento por ciento, pero estoy listo, porque esto no se ha terminado todavía».
El carabobeño fue operado por la rotura del hueso ganchoso en la primera mitad de temporada y ha estado bajo observación por dolores, golpes y torceduras en la espalda, la rodilla y el tobillo.
Los bucaneros van terceros en el centro de la Liga Nacional, con récord en .500, pero amanecieron este viernes a tres juegos y medio del segundo comodín.
«Recibir los pitcheos con el dedo así es extremadamente doloroso», admitió el trainer Todd Tomczyk.
«Me han pasado tantas cosas con esta mano, que no podría resumirlas», terció Cervelli. «Pero no puedo ponerlo como excusa, hay que jugar pelota».