El receptor venezolano Wilson Ramos fue figura en los medios de comunicación venezolanos e internacionales, este jueves, y fue consultado por casi una decena de reporteros que buscaban sus impresiones sobre el gran juego de 20 ponches que logró Max Scherzer el día anterior.
El carabobeño admitió que no sabía que también había logrado un pedacito de historia, al convertirse en el único catcher en la historia que ha recibido tres juegos sin hits y un encuentro de 20 fusilados, impresionante historial que inició en 2014, a su llegada a los Nacionales de Washington.
«No estaba al tanto de eso», reconoció Ramos, entrevistado por el periodista Andriw Sánchez. «Sabía que el récord de los Nacionales era 18. Me di cuenta de todo en la celebración».
El careta contó que desde temprano notó que algo era distinto a lo habitual.
«Antes del juego, vi a Scherzer muy emocionado», relató. «Quería lanzarle a su ex equipo. Lo vi diferente, muy agresivo, más de lo normal».
«Nos dimos cuenta de que la recta estaba imbateable y decidimos usarla más», continuó. «Al principio utilizamos curvas y sliders. Pero cuando vimos lo efectivo de la recta, no hubo mucho que planificar».
Ramos habló de la relación entre él y el as de los Nats.
«Fuera del terreno, Max y yo somos compañeros normales», señaló. «No nos reunimos para ir a fiestas o a comer, pero en el juego somos un buen equipo. A él le gusta hablar mucho de los bateadores y a mí también, nos entendemos».
¿Jugará en la LVBP, como prometen otros grandeligas?
«Este año seré agente libre, todo depende de eso», respondió. «Pero sí quiero, porque me gustaría estar en el Clásico Mundial».
Sobre eso, dijo en Zona ESPN que Omar Vizquel, manager de Venezuela, se le acercó para invitarlo al torneo internacional.
«Yo le dije, vamos pues». rió Ramos.
Ignacio Serrano
